Aislamiento social y su efecto sobre nonapéptidos hipotalámicos

Abstract

El comportamiento social en las especies surge de la necesidad de optimizar la forma, cantidad y calidad de obtener recursos. Las especies sociales, como la humana, responden a reglas complejas y las actividades que realizan requieren o involucran una interacción social. En el 2020 la población humana mundial es afectada por la pandemia COVID-19, y en ese sentido, la reducción de interacción o aislamiento social es la estrategia recomendada por la Organización Mundial de la Salud para frenar el contagio por SARS-CoV-2. Los nonapéptidos (NP) hipotalámicos: oxitocina (OT) y vasopresina (AVP) son reconocidos neurotransmisores centrales y neurohormonas periféricas. Los NP son moduladores del comportamiento social y algunos de sus sitios principales de síntesis y liberación coinciden con áreas de la red cerebral de comportamiento social (RCCS). Esta RCCS está conformada por un conjunto de áreas cerebrales que se activan diferencialmente permitiendo comportamientos sociales diversos como respuesta a estímulos externos. El objetivo de este trabajo es revisar en la bibliografía si existe evidencia sobre el efecto neuroendocrino del aislamiento social en mamíferos, en particular en NP hipotalámicos (OT y AVP). Encontramos dieciséis estudios en los últimos diez años que centran la atención en el vínculo aislamiento social-NP. Como resultado de esta revisión podemos afirmar que existe evidencia del efecto del aislamiento sobre OT y AVP en mamíferos. En particular está descripto que durante el aislamiento social los niveles de OT circulante y las áreas de la RCSS que contienen neuronas oxitocinérgicas muestran cambios dependientes de: sexo, especie y ambiente. Aunque no podría decirse que la temática de NP y comportamiento social sea novedosa, el rol del aislamiento social aún se encuentra lejos de estar bien caracterizado. En el contexto sanitario actual una perspectiva de investigación es estudiar el posible rol terapéutico de NP en relación a alteraciones de la salud mental.

Social behavior in animal species arises from the need to optimize the form, quantity and quality of obtaining resources. Social species, like humans, respond to complex rules and the activities they perform require or involve social interaction. In 2020 the world human population is affected by the COVID-19 pandemic. In this situation, reducing social interaction or isolation is the strategy recommended by the World Health Organization to stop the spread of SARS-CoV-2. The hypothalamic nonapeptides (NP): oxytocin (OT) and vasopressin (AVP) are recognized central neurotransmitters and peripheral neurohormones. NPs are modulators of social behavior and some of their main synthesis and release sites coincide with areas of the social behavior brain network (RCCS). This RCCS is made up of a set of brain areas that are activated differentially, allowing diverse social behaviors in response to external stimuli. The objective of this work is to review in the bibliography if there is evidence on the neuroendocrine effect of social isolation in mammals, particularly in hypothalamic NPs (OT and AVP). We found sixteen studies in the last ten years that focus on the social isolation-NP link. As results of this review, we can affirm that there is evidence of the effect of isolation on OT and AVP in mammals. In particular, it has been described that during social isolation the levels of circulating OT and the areas of the RCSS that contain oxytocinergic - neurons show changes dependent on: sex, species and environment. Although it can not be said that the topic of NP and social behavior is novel, the role of social isolation is still far from being well characterized. In the current healthcare context, a research perspective is to study the possible therapeutic role of NP in relation to mental health disorders.